Skinnner planteará una serie de consideraciones aceptadas
durante las décadas de los años 60 y 70 del siglo pasado, con el rubro de Enseñanza programada. Dichas consideraciones pueden resumirse
en cinco puntos básicos:
• Se debe contar con una definición operativa del
aprendizaje, lo que implica la formulación de objetivos educativos en términos
concretos conductuales.
• Según el principio de “aproximaciones sucesivas”, las tareas
deben plantearse subdivididas en sus más elementales partes para que puedan ser
aprendidas.
• En el contexto educativo debe recurrirse a la objetividad,
de tal forma que cada ítem de todo programa académico debe exigir del
estudiante una respuesta observable.
• Recurrir al recurso de motivadores intrínsecos
(reforzadores sociales, básicamente), lo que implica proveer al estudiante de
retroalimentación inmediata sobre cada realización.
• Reconocer que cada escolar sigue su propio ritmo de
aprendizaje.
Zepeda González, Adriana. 2005