La principal característica de este fenómeno, radica en que
a partir de un conjunto ordenado de aprendizajes discriminativos entre varios
estímulos, emergen sin entrenamiento explícito y también de forma ordenada,
nuevas relaciones de control discriminativo entre ellos. Estas relaciones entre
los estímulos siguen la lógica de la matemática de conjuntos, es decir:
Reflexividad (A=A), Simetría (Si A=B, B=A) y Transitividad (Si A=B y B=C,
entonces A=C). Por definición, la existencia de una clase de estímulos
equivalentes permite que alguna variable que afecte a un miembro de la clase,
afecte a todos los miembros
(Sidman, M., 1994).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario